TODO POR UN FLANDERS
Sabido es por todo el equipo de Primates, la apuesta entre nuestro presi Oriol y el capi Jordi. Para los pocos que aun desconozcan el contenido de la misma, les haré cinc cèntims (un breve resumen). El 24 de septiembre, dia de la boda entre el presi y Marisa, entrada la noche y con unas copas de más, acordaron que el que marcara más goles de los dos en el campeonato liguero obtendría como premio una invitada en Ca la Pili, o sea, los Flanders de toda la vida.
En el ecuador de la competición, el balance, de momento, le es favorable a Oriol, que aventaja en 3 goles a Jordi. Concretamente las cifras son, Jordi 2 goles y Oriol, 5. El resultado final aun está en el aire. Queda toda una segunda vuelta por disputarse y 3 goles en el futbol-sala teóricamente no son nada, es una cantidad muy pírrica, como para lanzar campanas al vuelo.
Pero la diferencia adquiere importancia al observar las cifras de F.C.Primates, lleva solo 28 goles a favor en 12 partidos disputados, a pesar de conseguir una excelente racha de 3 triunfos consecutivos, los marcadores siempre han sido muy pobres y ajustados. Por lo visto, un gol de Primates cuesta sangre, sudor y alguna que otra lágrima. El promedio del equipo es de 2,33 gol / partido (insuficiente para un equipo de fútbol-sala que quiera aspirar a algo...)
Con todo ello, la pregunta está clara ¿podrá Jordi adjudicarse la apuesta a pesar de estar 3 goles por debajo? ¿será una táctica para que el presi Oriol se confie? ¿se confiará el presi? Si quedan empate ¿habrá "comida"? Si puedo marcar yo, pero se la paso a alguno de los 2 para que empuje a gol, ¿tengo derecho a una patata brava? ¿cogerá el Coyote algún día al Correcaminos? ....
En fin, son tantas cositas mis señoritos que quiero saber... (BSO Los Angelitos)
La relación Oriol - Jordi es como la de estos dos personajes, amor - odio a raudales. Pero ¿quien es quien? Dejo la pregunta en el aire, pero el objetivo de ambos es claro, conseguir, no ser un Flanders, sino comer en Los Flanders, que es muy distinto. La foto es una representación, una metáfora de una escena ocurrida en el vestuario de Primates después de una acalorada discusión entre ambos. En fin, lo que ha unido el fútbol, que no lo separe una pelea tonta.
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